Entrevista en Diario de Ávila - Octubre 2012

                                          

Reportaje Publicado en el 21-10-2012 dentro del espacio "Conversaciones en el Lienzo Norte" del Diario de Ávila.

Entrevista realizada por Mayte Rodríguez a Mercedes Torija, creadora del Espacio "Karuna Equilibrio Energético"

«Esto es un camino para despertarnos, pero hay que querer caminarlo»

"Me metí en el mundo de las terapias holísticas por la necesidad de conectar con nuestra parte espiritual"

Entre tantísimas historias de abulenses obligados a marcharse de su tierra por motivos laborales, la de Mercedes Torija (Madrid, 1960) es justo la contraria: la de una madrileña que se enamoró de Ávila hace «casi ocho años» y aquí ha echado raíces. En aquel entonces, cuando decidió abandonar Madrid, dudó entre asentarse «en Ávila o en Segovia, pero no tuve ninguna duda, fue una cuestión de sensaciones» la que le trajo hasta aquí, confiesa.

Licenciada en Psicología y madre de una niña de doce años, Mercedes Torija ejerció como psicóloga infantil a mediados de los años ochenta. Pero «era aquella época en la que el trabajo tenía que ser fijo y para toda la vida», así que la búsqueda de la estabilidad laboral que imperaba entonces acabó llevándola a trabajar en un banco. Y allí estuvo varios años a pesar de que aquel empleo no le satisfacía «ni personal ni profesionalmente», apunta. En el tiempo libre que le dejaba el banco, empezó a hacer cursos de reflexología podal y de acupuntura, un mundo en el que acabó hallando su auténtica vocación hasta el punto de que hoy es para ella un medio y una forma de vida.

«Lo que me llevó a meterme en este mundo de las terapias holísticas es la necesidad de estar conectando con esa otra parte que somos, que es la espiritual y que va más allá del cuerpo físico», explica Mercedes, que practica métodos naturales como la reflexología podal, la técnica metamórfica o el reiki desde la consulta que tiene en Ávila.

Allí atiende a «todo tipo de gente», desde «mayores que buscan alivio al dolor de pies o de piernas que sufren» hasta abulenses de mediana edad «con mucho estrés o que tienen problemas para dormir», aunque también acuden personas «buscándose a sí mismas», afirma. Y tan diversos perfiles encuentran alivio en alguna de las técnicas que ella ofrece, con las que «se trabaja la parte física» a través del masaje, «pero también las capas energéticas», esas que no se ven.

Dice Mercedes que estas terapias «remueven nuestro ser interno», de ahí que haya  personas que acudan a ella «con regularidad porque han encontrado aquí algo que les hace bien, aunque no sepan ponerle nombre». Y es que, reconoce, este tipo de técnicas suelen «chocar con el desconocimiento» de la población, una barrera que queda superada cuando «se prueban» porque, afirma, «quien viene una vez, suele volver». De hecho, la mejor promoción de su consulta «es el boca a boca», ya que «el 90% de mis clientes viene
por recomendación de otra persona que lo ha probado», señala. Eso sí, Mercedes Torija deja bien claro que la reflexología podal, la técnica metamórfica u otros métodos similares «son complementarios a la Medicina, nunca sustitutivos de ella».

En ocasiones, las personas que se ponen en sus manos perciben que «una parte desconocida se despierta» en ellas, una sensación que unos acogen de buen grado y que otros rechazan «porque supone enfrentarse a lo desconocido, aunque sea de sí mismos», explica Mercedes. Y no todo el mundo parece estar dispuesto al «despertar» interior que brindan las técnicas que ella practica. «Esto es un camino para despertarnos, pero hay que querer caminarlo», recalca. Con independencia de lo que a cada uno le sugieran las terapias con las que trabaja, ella transmite paz. Y esa misma sensación es la que se respira en su consulta del centro de Ávila, desde donde suele «pasear» por «una ciudad muy bonita estéticamente» de la que también destaca «la amabilidad» de sus gentes.

A Mercedes Torija podemos encontrarla cualquier día de estos en el cine, del que se confiesa ferviente admiradora, aunque sus películas favoritas son «las que tienen mensaje», apunta. También le gusta la lectura y la pintura, aunque últimamente no dibuja, se limita a «colorear mandalas» como medio para expresar lo que siente en cada momento.

CUESTIONARIO:
¿Qué es lo primero que le viene a la cabeza sobre Ávila? La Muralla.
¿Qué es lo que más le gusta de Ávila? La tranquilidad.
¿Y lo que menos? (Se lo piensa). Faltan lugares de encuentro para actividades culturales.
Un rincón de Ávila y su provincia en el que se perdería... El Soto.
Un recuerdo de su infancia... Un amigo invisible que tenía de pequeña.
Un personaje o persona abulense que le haya marcado... Me gusta mucho Santa Teresa porque fue muy valiente en su época, siendo mujer todas las cosas que consiguió llevar a cabo.
¿Cuál es el mayor cambio que necesita Ávila? Mejorar sus comunicaciones. Utilizo mucho el tren y el viaje a Madrid es larguísimo, ahora es más largo que cuando yo llegué a Ávila hace ocho años.

¿Qué es lo que tiene que mantener? Lo cuidada y lo limpia que está la ciudad. Tengo amigos de fuera que siempre que vienen me lo comentan.
¿Qué le parece Ávila hoy? Me parece que está bien.
¿Cómo ve Ávila en el futuro? La veo mejor que ahora porque creo que se están haciendo cosas para ampliar todo, aunque lo del transporte que comentaba antes es lo que creo que está más descuidado. 
¿Qué puede aportar a Ávila? Las técnicas con las que trabajo para que sean cada vez más válidas para la gente, para que cada vez más personas las utilicen y nos hagan a todos la vida más fácil.